ETAPAS DEL CÁDIZ EN PRIMERA DIVISIÓN

Tras sesenta y siete años de existencia el Cádiz en 1977 el ansiado ascenso a la Primera División. En la temporada 1977/78, en su primera temporada en la División de Honor, el Cádiz paga la novatada con una participación que roza el ridículo en algunos encuentros y desciende de categoría. Se produce el debut de Pepe Mejías, en un partido que el Cádiz juega como local en el estadio “Domeca” de Jerez de la Frontera, por cierre del Carranza. Enrique Mateos no finaliza la temporada siendo sustituido por Mariano Moreno. Manuel de Diego dimite al finalizar la campaña.

En su regreso a la Primera División en la temporada 1981/82, el Cádiz gana en el verano del 81 su primer Trofeo Carranza. El equipo en aquella temporada se ganó el calificativo del “Matagigantes”, dado que del Carranza hizo un fortín en el que derrotó a la mayoría de los equipos poderosos de la categoría. Pero fuera de Carranza se perdieron todos los partidos excepto el último en Castellón que ganó por 0-1, por lo que al final de campaña, pese a quedar empatado a puntos con Las Palmas y Gijón, por culpa del gol-average, se desciende de categoría. Se traspasa al Real Madrid el lateral gaditano, Juan José, que llegaría a realizar buenas campañas en el club blanco, llegando a ser internacional absoluto.

 Su nuevo paso por la Primera División resulta fugaz como los dos anteriores y solo dura una temporada, 1983/84.
A partir del último ascenso a Primera en Abril de 1985, se inicia el ciclo más glorioso de su historia, codeándose el Cádiz durante 8 años seguidos con los mejores equipos del fútbol español.

 Se inicia una nueva temporada, con Paquito como entrenador, y se consigue por primera vez en la historia la permanencia en la División de Honor del fútbol español. Con un polémico empate en Carranza ante el Betis se sella la proeza, hablándose de un posible pacto entre los dos equipos andaluces.

 En esta temporada se disputa la famosa campaña de los “play-off”. El Cádiz termina colista en la liga regular y vuelve a repetir plaza en el “play-off”, pero sucede que se lleva a cabo una reestructuración ampliando la Primera División hasta 20 equipos, por ello sólo desciende un equipo. Ante esto Manuel Irigoyen propone y es aceptado que no fuera el último el que descienda, sino el peor de una “liguilla de la muerte”, a una sola vuelta, entre los tres equipos que debían descender, es decir, Santander, Osasuna y Cádiz. El Cádiz de la mano de David Vidal empata sus dos encuentros y gracias a la victoria del Osasuna sobre el Santander, es este último el que desciende. Increíblemente, un Cádiz totalmente desahuciado y condenado al último lugar de la clasificación, logró salvar la categoría gracias a la inteligencia y picardía de su presidente.

La temporada 1987/88 es digna de recordar pues de la mano de Víctor Espárrago se obtiene la mejor clasificación de toda la historia en Primera División, duodécimo lugar en la tabla. Una de las claves del éxito fue que Espárrago supo sacarle bastante provecho a un recuperado “Mágico” González. El Cádiz “B” comienza a dar una buena hornada de jóvenes jugadores como Cortijo, Barla, Jose, Poli, etc.

En la siguiente temporada 1988/89, se contrata los servicios del entrenador austríaco Senekowisch, al cual, debido a su inexperiencia en el fútbol español, le cuesta pronto su puesto en el banquillo siendo sustituido por David Vidal. El equipo se mantiene en la zona baja de la clasificación y en el último partido se gana en Murcia por 0-1, con gol de Jose González, y el Cádiz sorpresivamente se salva del descenso y la promoción.

La temporada 1989/90 queda marcada por la larga polémica David Vidal– Mágico” González. La afición demanda la presencia de Mágico, pero Vidal no lo alinea alegando que no trabaja para el equipo. El pulso lo gana el salvadoreño. En los cuatro últimos partidos de liga, con Collin Addison en el banquillo, es necesario el triunfo y se consigue ganándolos todos por 1-0. El Cádiz sigue aumentando su leyenda de equipo milagro. En la Copa del Rey se obtiene la mejor clasificación de la historia alcanzando las semifinales donde es eliminado por el Real Madrid.

La temporada 1990/91 resulta épica en la historia del cadismo. Aquel año de nuevo se llega con el agua al cuello en el final de temporada. En una tarde gloriosa se derrota al famoso “dream team” del Barcelona de Johan Cruyff por un escandaloso 4-0, cuando los catalanes venían a Carranza dispuestos a celebrar en Cádiz su título de Liga. De nuevo parecía que el Cádiz podría salvarse. Se llega así a la última jornada y nos la tenemos que ver en Carranza con el Zaragoza, el cual viene a eludir la promoción. El equipo maño se adelantó en el marcador dejando la situación casi insalvable. Sin embargo, el tandem Ramón Blanco-Lorenzo Buenaventura, que ocupa el banquillo al haber sustituido al argentino Héctor Veira, decide dar entrada al campo a un chaval de la cantera, Kiko Narváez. Faltando unos diez minutos para la conclusión del partido, el Cádiz estaba con los dos pies en Segunda División, pero Kiko provoca un penalti que es transformado por el argentino Dertycia y un minuto después, el propio Kiko conseguía el gol del triunfo, y el Cádiz accede a la promoción escapando del descenso. En ella el obstáculo es el C.D. Málaga. Tras perder en la Rosaleda por 1-0, se consigue igualar la eliminatoria en Carranza y en una dramática tanda de penaltis, Szendrei paraba el penalti decisivo que dejaba de nuevo un año más al Cádiz en la élite del Fútbol español.
La temporada siguiente, con Ramón Blanco en el banquillo, el Cádiz elude también el descenso directo en la última jornada con un empate a cero ante el Gijón en Carranza. La promoción la disputa con el Figueras y de un modo relativamente cómodo la supera, ganando en casa por 2-0 con goles del brasileño Mario Tilico (que consiguió goles decisivos para la salvación del Cádiz) y el chiclanero Fali Benítez, y empatando a 1 en Figueras con gol de Mami Quevedo. Nuevamente se consigue mantener la categoría.

Pero tanto va el cántaro a la fuente, que ...... en la temporada 1992/93 finaliza la etapa gloriosa del Cádiz en Primera División. Esta temporada no se repitió el milagro y parte de culpa la tuvo la conversión del Club en sociedad anónima. Como los empresarios no responden y la afición no tiene el poder adquisitivo necesario para ello, Irigoyen se ve en la necesidad de convencer al Ayuntamiento para que se haga cargo de las acciones. Se sitúa como presidente al concejal socialista Rafael Garófano, que ante la prioridad de recuperar la cantidad invertida, a través de unas negociaciones llevadas a cabo por Irigoyen, traspasa la sociedad a un grupo de inversores (Cádiz Promociones Deportivas) encabezados por el polémico Jesús Gil, presidente del Atlético de Madrid. Este hecho resultaría catastrófico para la entidad, como el tiempo acabó por demostrar.


Tiempo después, en la temporada 2004/05 el Cádiz obtiene de nuevo el ascenso a primera división gracias a un golazo de Oli en casa del eterno rival. El paso por primera solo duró un año puesto que quedamos en 18ª posición.


No hay comentarios:

Publicar un comentario